Las ventajas respecto de los métodos tradicionales de inyección de cemento o de otras técnicas de recalce como micropilotes son:
Ventajas
Muy poco invasivo y sin necesidad de obras auxiliares.
Rapidez de ejecución y de entrada en carga.
Económico, respecto a otras técnicas.
Ligero, no sobrecarga el terreno produciendo mayores asientos.
Accesible a todos los puntos donde haya que inyectar, ya que se realiza con herramienta ligera.
Mayor expansión producida por la reacción química del material, y no solamente por la presión de inyección.
También es el sistema más adecuado en algunas edificaciones antiguas que no se puede alterar su cimentación y tan solo se puede actuar en el terreno. Mejoramos el terreno que hay bajo la cimentación de la edificación sin apenas afectarle y transmitiendo vibraciones prácticamente nulas durante la ejecución de los trabajos.
En otros casos, y debido a la presencia de corrientes de agua subterránea, es el único método que nos garantiza la permanencia del material que se inyecta.
